¿Arquitectura como refugio o como símbolo?

 

Desde el Renacimiento hasta la actualidad, la arquitectura ha oscilado entre dos conceptos fundamentales: la cobertura ("shed") y el símbolo ("symbol"). En el Renacimiento, Miguel Ángel exploró la relación entre la piel y la estructura o anatomía en sus esculturas y dibujos, otorgándoles volumetría y profundidad a sus obras mediante el tratamiento de la superficie. Esta distinción entre interior y exterior se refleja también en la arquitectura contemporánea, como en la Ópera de Sídney, donde la piel escamosa de cerámica disocia el revestimiento del espacio interior, generando un efecto visual que varía según la incidencia de la luz, recordando la piel de un reptil.



En el Barroco, la arquitectura adquirió un dinamismo expresivo, donde la piel del edificio comenzó a ondularse y adquirir movimiento, como en San Carlo alle Quattro Fontane de Borromini. Este enfoque evoluciona en la arquitectura posmoderna con Venturi, quien en "Learning from Las Vegas" resalta la importancia del símbolo sobre la estructura misma, privilegiando la comunicación visual en la ciudad contemporánea. Así, edificios como el Guggenheim de Gehry y el Cursal de Moneo adoptan una lógica estructural en la que la piel se convierte en un elemento fundamental de percepción, evocando formas escultóricas que generan impacto más allá de su funcionalidad interna.

Hoy en día, la arquitectura sigue explorando estas dos dimensiones, donde la materialidad y el tratamiento de la piel del edificio pueden alterar la percepción del espacio. Gehry utiliza titanio en el Guggenheim para evidenciar imperfecciones y pliegues, evocando la obra de escultores como Chamberlain y Sluter, mientras que Moneo emplea capas de vidrio translúcidas en el Cursal para lograr un efecto similar al de una lámpara japonesa. En ambos casos, la piel arquitectónica se convierte en el principal medio de expresión, revelando que, más allá de su función como refugio, la arquitectura sigue siendo una manifestación simbólica capaz de esculpir tanto el espacio físico como la percepción humana.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El teatro de Étienne-Louis Boullée y Jean-Nicolas-Louis Durand

"Una segunda vida" de Guillermo Acevedo y Norma Fuster

Las ideas de Jorn Utzon